sábado, 29 de enero de 2011

WALL-E


Me es difícil creer que exista algún cinéfilo que no adore a Pixar. La productora va ya por su doceavo largometraje, cada uno mejorando sobre las bases del pasado.  Emocionales, perfeccionistas y con una gran pasión por el cine; Pixar nos da en 2008 una de sus grandes joyas. WALL-E (EUA, 2008) de Andrew Stanton muestra perfectamente porque me encanta el cine. Pixar no solo tenía una historia que contar sino una experiencia que decidió crear.

Pixar es reconocido por nunca tomar la ruta fácil. Cada historia, cada escena, cada momento. Todo se siente fresco y nunca antes visto. WALL-E no es la excepción a la regla. Todo comienza con WALL-E, un anticuado robot de limpieza que fue abandonado en la Tierra cientos de años atrás. Un día, una gran nave especial aterriza cerca de su casa y con ella se encuentra un androide llamada Eva. Él se enamora al instante y hace todo lo posible por llamar su atención. Su objetivo era buscar vida orgánica y cuando lo logra necesita partir. La aventura que surgirá de eso los posiciona en una disyuntiva. ¿Son más importantes los sentimientos, que el propósito por el que fueron creados? Basándose en esa premisa, Pixar construye no solo una historia sino un universo como no hay otro.

Desde el inicio del espectacular primer acto, somos introducidos a una impresionante habilidad narrativa. Sin palabras, sin diálogos, sin escritos. Únicamente usando uso de las expresiones; Pixar consigue dar vida a personajes que no fueron creados para tenerla. WALL-E y Eva son más humanos que la gran mayoría de personajes en cualquier otra cinta. Desde su forma de moverse hasta la manera en que sus ojos cierran. Cada expresión viene acompañada de una emoción con la cual es imposible no simpatizar. La primera media hora no presenta una sola palabra y aun así sentía que conocía a estos personajes de ya hace mucho tiempo. Eso es exactamente lo que busca este medio y no puedo estar más feliz por ello.

Otro aspecto excepcional es la animación en sus propios méritos.  Imágenes que evocan más de lo que mil páginas de guion nos podrían decir. Una distopia con rascacielos de basura, un crucero espacial de tamaño de una ciudad y una galaxia de formas que simplemente quitan el aliento. El cuidado a cada detalle es impecable. Puedes ver cada rincón de la pantalla y encontrar algo único a cada centímetro. Como en todo filme de Pixar, WALL-E está repleta de referencias a otras películas. Aún recuerdo mi sorpresa la primera vez que vi esta cinta. El homenaje a HAL 9000 de 2001: Odisea al Espacio (1968) es magnífico y un gran tributo para todos aquellos que disfruten del cine. Otras referencias menores alientan al espectador a ver cada cuadro delicadamente y sin perder detalle.

El mensaje que impulsa la película es fácil de comprender. No tiene complicaciones ni tampoco intenta ocultarse de forma alguna. Es claro que Pixar buscaba crear conciencia en sus espectadores. Vivimos en una sociedad sostenida por el consumismo. El seguir con esta tendencia nos podría llevar a serios problemas ecológicos. Por ejemplo, habitar un mundo donde la basura construya las montañas más altas y el polvo sea el nuevo “aire fresco”. No querríamos estar en semejante situación. Con eso en mente, en una parte del filme el mismísimo Capitán hace una importante observación. Al igual que una planta, la Tierra es una gran ser vivo y tiene que ser cuidada como tal.

Pixar no decepciona, conservando su lugar en la industria como fábrica de obras maestras. Cuando todo ha sido dicho y hecho, el filme nos habla más de sí mismo con lo que no dice, que con lo que sí cuenta. Una joya fílmica de la animación en todos los sentidos.  WALL-E es fascinante, emotiva y creada a partir de una gran pasión por todo lo que representa el cine. 

viernes, 28 de enero de 2011

El Experimento


Antes de ver la siguiente cinta había escuchado múltiples comentarios acerca de su dificultad para "digerir". Es decir, la película es bastante difícil de ver debido a su contenido. Después de verla puedo calificarla como tal. Si bien no al nivel que me hicieron creer, este particular aspecto ciertamente mejora la cinta. El Experimento (Das Experiment, Alemania, 2001) de Oliver Hirschbiegel triunfa al hacernos sentir empáticos y conectados a su narrativa.

La premisa se basa en un famoso experimento llevado a cabo en la cárcel de Stanford. En este, se tomó participación voluntaria por parte de los involucrados. A una mitad se les dio el rol de guardias mientras a la otra mitad se le tuvo prisionera. Lo que de inicio parecía una buena investigación cayo en la humillación y degradación humana. El filme busca relatarnos lo ocurrido en esos cinco días, en donde los derechos civiles fueron simplemente anulados. Afortunadamente la historia es interesante a lo largo de la cinta. Esto nos deja una sencilla transición entre sus tres principales actos.

Normalmente no me gusta comentar una película únicamente por sus actos. Después de todo, lo importante es el resultado final y el que tan efectivo fue. En este caso, sin embargo, necesito hacer una excepción. Si bien la cinta fue buena, hubo algunas partes que definitivamente bajaban el ánimo. Con un primer acto un tanto mediocre, un segundo acto estupendo y un tercero que tuvo un poco de ambos; no sabría por dónde empezar.

En el primero, somos introducidos a nuestro protagonista, Tarek Fahd (Moritz Bleibtreu). La actuación de Bleibtreu es emocional pero desgraciadamente cae en lo tedioso de forma un tanto apresurada. Esto no hace de un buen filme uno malo pero si desalienta un poco. Sabemos que su figura es la de un rebelde, mas a momentos cae en lo exagerado. En los primeros minutos, Hirschbiegel introduce el peor elemento de la cinta. Una relación amorosa totalmente innecesaria e irrelevante además de posteriormente obstructiva. Fahd sufre un accidente en manos de una deprimida joven llamada Dora (Maren Eqqert). Ambos van a su departamento, se acuestan y de forma repentina se tornan en almas gemelas. Poco cuidado, apresurado y con una aburrida personificación por parte de Eqqert.

En esos momentos sentía que la película me había perdido. Si no hubiese sido por un grandioso segundo acto, eso hubiera ocurrido. Durante los siguientes setenta minutos el espectador revive actos de extrema humillación.  Fuertes, brutales y efectivos. Estos momentos caracterizan el filme y lo hacen único. Empezando por el remarcable personaje de Berus (Justus Von Dohnanyi), quien lidera el grupo de sádicos guardias, el filme toma fuerza. Berus no solo es inteligente y calculador sino una persona carente de ética alguna. No le importa torturar a los presos ni tampoco llevar su rol hasta las últimas consecuencias.

El último acto difícil de calificar. Si bien es satisfactorio y una adecuada conclusión, el uso de la música y la fotografía es pésima y algunas acciones de nuestros personajes son cuestionables. Había momentos en los cuales escenas perfectamente logradas eran arruinadas por la molesta banda sonora. En otros, los personajes optaban por decisiones que no tenían el menor sentido.  Todo esto hacia que un buen final con momentos positivos se volviera una tira de escenas incongruentes. Afortunadamente el peso de lo que hizo bien supero a lo que hizo mal.

A pesar de todos sus problemas, disfrute mucho el filme, o al menos lo hice durante su segunda y tercera parte. La cinta definitivamente no es para todos. Su contenido grafico es fuerte mientras sus complejas implicaciones morales pueden molestar a algunos. Un interesante y entretenido filme que cuestiona si realmente somos buenos o malos más allá de una simple intención. 

miércoles, 26 de enero de 2011

Tiburón


Hace ya algunos años que vi por primera vez Tiburón (Jaws, EUA, 1975) de Steven Spielberg. Aún recuerdo perfectamente el impacto que tuvo esta película sobre mí desde esa proyección. Una sensación de incertidumbre y ansiedad. El preguntarme a quien se “comerán” primero y quien sobrevivirá. La agobiante composición de Williams reproducida en el fondo, alertando con esto que algo definitivamente no está bien.  Cada uno de estos elementos mezclados en una edición perfecta dentro del contexto de la cinta. Más de tres décadas han pasado desde su estreno, e incluso hoy en día mantiene “ese” efecto que no he podido olvidar.

Una historia relativamente arquetípica progresa la cinta en sus dos horas de duración. La celebración de 4 de Julio está cada vez más cerca y un gigantesco tiburón blanco decide darse un festín en las costas locales. El Comisario Brody (Roy Scheider)  se encuentra a cargo del “problema” y más pronto que tarde se sale de su control. Buscando ayuda en un oceanógrafo llamado Matt Hooper (Richard Dreyfuss) y el cazador local Quint (Robert Shaw) se embarca con el fin de capturar a la criatura.

Es claro que una historia tan simple necesita de algo más que su sencilla existencia. Es aquí donde vemos un Spielberg en lo mejor de su juego. El filme cuenta con una dirección brillante y audaz. Convirtiendo nuestra imaginación en el suspenso más eficaz. No se necesita mostrar grandes cantidades de violencia, sangre y efectos para lograr buenos resultados. Basta con crear un gran lienzo blanco dentro del filme; donde cada espectador pueda reflejar sus propios miedos.  El no saber qué ocurrirá y el cómo lo hará nos deja ansiosos de continuar junto los héroes de la historia.

Spielberg logra un filme efectivo no solo en el suspenso sino también en sus entrañables personajes. Tiburón no sería la misma cinta sin la interacción entre Brody, Matt y Quint. Las dos horas de duración de la película no son en vano. Spielberg acierta en su decisión de desarrollar sus personajes por encima de cualquier violencia explotativa. Sería imposible podernos identificar dentro de la historia sin conocer a este trio. Brody siendo aquel con los miedos internos pero la suficiente fuerza como para afrontarlos. Matt siendo nuestro punto lógico dentro de la historia aquel con las decisiones de mayor sentido común. Quint siendo nuestro aventurado cazador con un odio muy bien justificado en lo que es mi escena favorita del filme entero. Cada uno complementa al que tiene a lado y sus problemas son tan reales como los nuestros.

No podemos olvidarnos del verdadero protagonista en toda esta historia, el Tiburón en sí. Usando tomas tanto de tiburones reales como de uno mecanizado creado especialmente para el filme. Spielberg con esto logra una transición perfecta consiguiendo así un efecto creíble. A pesar del uso de estas tomas, el Tiburón no cobra personalidad sino hasta que no lo vemos. Esos momentos donde el espectador construye su propio escenario y únicamente imagina que podrá ocurrir. Cabe mencionar que los efectos del Tiburón son relevantes aun hoy en día. De hecho, es el mejor (y más realista) tiburón ficticio que he podido ver en una película.

Siendo un filme que continua siendo relevante y entretenido tantos años después de su estreno es solo prueba de la calidad del mismo. Aquel donde la expresión “menos es más”  cobró un valido significado. Una indiscutible obra maestra dentro del género del suspenso. 

martes, 25 de enero de 2011

El Código de Thomas Beale


Me gustaría empezar la entrada de hoy disculpando la falta de una ayer. Estuve muy ocupado y lamentablemente no me dio tiempo de ver ninguna de las películas que había planeado. Otro punto importante es que el “Especial – La Historia de la BBS” se verá presentando en partes numeradas y no en una sola semana como tenía planeado. Esto último debido a que el periodo de exámenes está cerca y de eso dependerá el tiempo que tenga para esos filmes.

Volviendo de nuevo a la entrada, el día de hoy escribo acerca de un trabajo inusual pero con un gran sentido de lo que es ser especial. El Código de Thomas Beale (The Thomas Beale Cipher, EUA, 2010) de Andrew S. Allen. Además de iniciar con una premisa bastante interesante; el cortometraje se destaca por una razón: Su técnica de animación. Lo que se puede ver en los diez minutos de duración del filme es algo jamás antes usado en el medio. De inicio sabemos que será algo original y lo bueno es que cumple en todo sentido.

La historia es interesante y mantiene el interés del espectador de inicio a fin. Todo comienza con la narración de un extraordinario criptógrafo, el Profesor White. Por años se ha intentado descifrar uno de los códigos más enigmáticos de la historia, el Código de Thomas Beale. White está a un solo paso de ser el primero en hacerlo pero no sin compañía indeseada que trate de evitarlo. Con esa historia como base, se empieza a desenvolver una narrativa relativamente linear. Esto no es malo en ningún sentido pues su ejecución ha sido muy cuidada.

El reparto seleccionado por Allen da personalidad de forma única a cada personaje especialmente a White. Uno de mis aspectos favoritos en el corto es la naturaleza sistemática de White. Siempre previendo que ocurrirá y adelantándose a la situación antes de que esta lo atrape a él. La gran satisfacción personal que le causa estar tan cerca que incluso podría oler el oro frente a él. El resto de los personajes se tornan intrigantes al momento de entrar a la mejor escena. Involucrando un tren, múltiples sospechosos  y un suspenso bien logrado, Allen crea villanos simples pero efectivos.

Sin embargo, el aspecto más único y gratificante tiene que ser la animación presentada aquí. Como ya mencione antes; esta nueva técnica es única en su tipo y que mejor forma de presentarse que usándose creativamente. Desde las ingeniosas texturas hasta los efectos que nos dan la ilusión de estar en un periódico. Esa variedad de efectos sacan a relucir los mejores momentos de este pequeño filme. Cada segmento de importancia es resaltado por una inteligente secuencia. Todo esto nos da un increíble espectáculo visual, uno de eso que tienen que verse para realmente entenderse.

Cuando uno tiene la oportunidad de apreciar estas breves historias, es cuando el medio en cortometraje se torna realmente satisfactorio. Allen únicamente nos da un ejemplo de lo magnífico que son estos trabajos cuando se realizan con cuidado y pasión. El Código de Thomas Beale rompe el molde de lo convencional, volviéndose así una pieza de arte excepcional.  A continuación dejo el link al cortometraje completo, realmente recomendado. 

El Código de Thomas Beale: The Thomas Beale Cipher - Short of the Week

domingo, 23 de enero de 2011

El Resplandor


El día de hoy tengo una entrada un tanto especial. La primera reseña en el blog sobre una obra del gran maestro Stanley Kubrick. De inicio debería de admitir algo, soy un gran admirador del trabajo de Kubrick y considero que hasta su película menos lograda se encuentra por arriba de algunos filmes que muchos calificaran como perfectos. Lo primero que llegue a notar cuando inicie a ver el cine de Kubrick fue la gran virtud que poseía al crear sus proyectos; su adaptabilidad era verdaderamente increíble. Cuando uno voltea a ver su filmografia no se puede pasar por alto el hecho de que intentaba experimentar géneros variados. Desde la ciencia ficción hasta la sátira, de la comedia al horror, prácticamente no hubo genero que no intentara. La entrada de hoy se centra en su ejercicio en el horror, El Resplandor (The Shining, EUA/Reino Unido, 1980). 

Primero es bueno hablar un tanto de su historia. Jack Torrance (Jack Nicholson), un frustrado escritor con una adicción al alcohol, es contratado por el Hotel Overlook para cuidarlo durante su temporada invernal a lo largo de 5 aislados meses. Acompañado por su esposa Wendy (Shelley Duvall) y su hijo Danny (Danny Lloyd) decide tomar el empleo siendo previamente advertido como hace algunos años un viejo cuidador asesino a toda su familia con un hacha y cometiendo suicidio posteriormente. Conforme pasan los meses, Jack se da cuenta que el Hotel guarda secretos que ninguno esperaba encontrar mientras es conducido a una demencia cada vez mas inevitable. La cinta es remotamente basada en la obra con el mismo nombre por el autor americano Stephen King. Después de su estreno, este la critico fuertemente argumentando que era una mala adaptación en donde grandes libertades se habían tomado. Si de algo sirve, pienso que Kubrick hizo bien su trabajo y que este filme es simplemente otra interpretación de la historia creada por King. 

El Resplandor tiene muchos puntos a su favor pero considero que el mas fuerte de ellos es la actuación de un fenomenal Jack Nicholson como nuestro protagonista. Siempre que veo una cinta con Nicholson en su reparto pienso en que nuevo papel de locura interpretara. Realmente parece haber nacido para este tipo de papeles y cuando esta en su mejor momento no hay nadie quien lo pare. Jack Torrance juega el protagonista/antagonista con el que no es fácil simpatizar mas si es sencillo sentir pena de. A pesar de su temperamental y explosivo carácter, al ver la cinta me encontré pensando que la verdadera victima es en realidad el mismo. El camino a la locura de Torrance es verdaderamente remarcable debido a la fuerza que Nicholson expone frente a la cámara. Desde sus gestos hasta su forma de hablar es distintivo creando así un personaje que sale lo convencional y se torna en un símbolo. No quiero revelar mi escena favorita y con eso arruinarla a otra persona  por lo que solo diré que involucra un bate, un amplio vestíbulo y un increíble intercambio de lineas entre Nicholson y Duvall.  

Kubrick tiene que ser uno de los pocos directores con un estilo concretamente establecido. La gran mayoría de las películas de Kubrick cuentan con ciertos enfoques de cámara, movimientos de la misma, expresiones por sus personajes y uso de símbolos que ayudan a distinguirlas de todas las demás. Aquí no es la excepción y el filme se ve repleto de estas marcas. Un tipo de toma muy particular que es usado en múltiples ocasiones a lo largo de la cinta se enfoca en un solo punto mientras lentamente se va alejando para revelar posteriormente revelar la escena. Otro distintivo fue su uso de figuras simbólicas para representar el descenso a la demencia de Jack, entre las cuales se encuentran apariciones, alucinaciones y voces que le hablan de ningún lugar aparente. 

La excelente fotografía y banda sonora establecen una atmósfera adecuada al tono de la cinta. Una escena en especial sobresale por su gran complejidad. Un pasillo amplio y organizado es cubierto por una cascada de sangre proveniente de un elevador en el fondo. Es una de esas escenas que solo se logran una vez y cuyo único intento fue exitoso. La gran expulsión choca contra la pared contraria al elevador y comienza a inundar la habitación rápida y elegantemente. La música por el otro lado es aquel elemento que realmente sube a la cinta de un suspenso bien logrado a horror psicológico. Aumentando en intensidad cuando un momento inesperado se aproxima y disminuyendo radicalmente de forma casi instantánea posteriormente. Lo efectivo aquí es el hecho de que la música es utilizada en muchas escenas, la mayoría de las cuales terminan sin una sola acción posterior. 

Muchos fanáticos del cine ven a El Resplandor como una pieza maestra en el genero del horror. Una película que se separo de lo convencional gracias a su ingenioso director y unas actuaciones realmente sobresalientes. La mejor parte es como incluso después de múltiples reproducciones el filme permanece fresco y siempre con algo nuevo que mostrar. 

sábado, 22 de enero de 2011

El Hombre mas Maravilloso en el Mundo


Al momento de ver un cortometraje, jamas he podido detenerme y no buscar una interpretación a lo que pienso que visionaba el director con ese trabajo. Es obvio que existen muchos casos con mayor "libertad de interpretación" que otros, en otras palabras, que son un tanto mas lineares en su narrativa. El cortometraje del cual decidí hablar el día de hoy es un claro ejemplo de historias con interpretación abierta. Y no solo me refiero a una o dos sino a un trabajo que no se podría admirar de manera completa si no se le fuera a interpretar del todo. El Hombre mas Maravilloso en el Mundo (The Most Beautiful Man in the World, Reino Unido, 2002) de Alicia Duffy es un ejercicio narrativo que necesita experimentarse para ser entendido.

Todo comienza con un día soleado, una aburrida niña decide entretenerse un poco haciendo lo que se pueda, desde dormir hasta sacar a pasear a su perro. Al no tener mucho que hacer, decide recorrer un poco los alrededores y es ahí donde se encuentra con un misterioso hombre jugando con su perro. Este le quita un insecto de su hombro y se lo devuelve. A la distancia su despistada madre la observa por lo que regresa a su hogar. Eso es básicamente todo el cortometraje. Al principio no parece tener nada de especial e incluso puede sonar aburrido, sin embargo, después de superar su aparente trivialidad nos topamos con una excelente pieza narrativa. 

Es difícil tratar de comprender su significado, ni se hable de simplemente explicarlo, pero considero que eso es justamente lo que Duffy buscaba. En su intento de crear un corto que pudiera ser libremente interpretado, Duffy logro crear un filme universalmente accesible. Cinco minutos que pueden decir algo distinto a cada espectador. Algunos podrán decir que su objetivo era expresar esa difícil sensación que tenemos acerca de una inocente figura en un mundo lleno de peligros. Otros dirán que realmente era una expresión de lo maravilloso e intrigante que puede ser lo que no conocemos. Uno llega a comprender que Duffy tuvo éxito cuando cada una de esas interpretaciones es valida y sostenible. Son artistas como Alicia Duffy los que mas esperanzas traen al medio a su llegada. 

Otro gran aspecto de este pequeño filme (Tiene solo 5 minutos de duración)  es su muy trabajada y cuidada cinematografía. Empezando por ligeras y ambiguas tomas de una niña consumida por el aburrimiento y terminando en vastas tomas donde los pocos elementos se unen con el fondo. De inicio a fin la calidad se mantiene con cada imagen. Un trabajo estéticamente limpio y perfeccionista en su ejecución. Es en estos casos donde expresiones como "Una imagen dice mas que mil palabras" cobran gran importancia. Siempre moviendo la historia un paso adelante y sin desperdiciar un solo momento de su extensión, Duffy refuerza sus claras habilidades narrativas con fuertes y solidas imágenes que cuentan una historia por si mismas.

Existen muchas interpretaciones y aspectos que se podrían decir acerca de este trabajo pero parte de su efectividad se perdería al hacerlo. Este no es un cortometraje hecho simplemente para verse, sino para discutirse y experimentarse. Como es costumbre, dejo el link al articulo donde puede visualizarse y de paso recomiendo a todo lector de este blog que explore un poco el sitio, es increíble la cantidad de excelentes trabajos que uno puede encontrar. 

El Hombre mas Maravilloso en el Mundo: The Most Beautiful Man in the World - Short of the Week

viernes, 21 de enero de 2011

Especial - La Historia de la BBS


A partir del Lunes de la siguiente semana planeo iniciar el primer "Especial" de Proyector en Espera. Toda esta semana pasada había estado pensando en un tema que fuera lo suficientemente interesante para conmemorar la ocasión y decidí que la historia sobre esta compañía creada por cinefilos y para cinefilos seria la perfecta opción. Escribiré una entrada al día acerca de la historia y los trabajos de esta productora independiente, sus dificultades y éxitos, el como se concibió seguido de un dejar de existir. Reconocida por filmes como Busco mi Destino (Easy Rider, EUA, 1969) de Dennis Hopper y Mi Vida es mi Vida (Five Easy Pieces, EUA, 1970) de Bob Rafelson; las Producciones BBS cambiaron y dieron forma a lo que conocemos como la Era del Nuevo Hollywood. Ademas de volver a colocar un ya agonizante cine independiente a inicios de los 70s en el panorama Hollywoodense, la productora llego a ser el hogar de unos cuantos clásicos que marcarían al Cine Americano de su época. 

A todo buen especial debe de precederle una buena introducción y en Proyector en Espera esa no es la excepción. Empecemos por entender y comprender que eran las Producciones BBS y el porque de su gran importancia. 

De la misma manera que sucedió con un sin fin de personas en la América de los 60s, Bob Rafelson y Bert Schneider percataron que todo estaba llegando a un cambio. Políticas habían cambiado, la sociedad  era transformaba y el cine era sometido a nuevas convenciones. Todo tenia que experimentar un cambio natural y transitorio. Esto era justamente lo que Rafelson y Schneider pensaban cuando comprendieron esa inconfundible verdad. Soñando con producir cine, sin mucha suerte en las finanzas y contra todo pronostico, crean las Producciones Raybert a finales de los 60s. 

De inicio no contaban con un gran capital pero si con talento y una larga lista de contactos. Antes de pasar al "gran" formato, idearon juntos un episodio piloto cuya trama se asociaba con las ocurrencias de una banda de rock aun por hacerse famosa. El piloto gusto tanto a los inversionistas que la NBC decidió producir toda una temporada, ganando con ello fama mundial a los jóvenes directores. Llamada The Monkeeys en aquellos países donde se exhibió y tuvo éxito, este fue el primer proyecto en cualquier media con base en la unión Rafelson/Schneider. 

Posterior al éxito de su serie, Rafelson y Schneider deciden realizar su primer largometraje bajo las Producciones Raybert. Cabeza (Head, EUA, 1968) continua la dinámica entre personajes que ya habían realizado previamente en The Monkeeys. Debido a conflictos internos entre la banda y los directores, el proyecto llego a su terminación con relaciones quebrantadas. Esto ocasiono que tanto Rafelson como Schneider siguieran por su lado y movieran su atención a cierto nuevo proyecto que los volvería a colocar en el mapa de forma casi inesperada. En 1969 se estrena Busco mi Destino (Easy Rider) con Hopper a la dirección. Siendo premiada y aclamada por todo tipo de circuitos de festival (Incluyendo un premio como Mejor Opera Prima en Cannes), esta cinta puso de nuevo a Producciones Raybert en el ámbito del cine independiente. 

Ese mismo año, Rafelson y Schneider crean una sociedad con Steve Blauner durante la producción de Mi Vida es mi Vida (Five Easy Pieces). De esta alianza surge el nuevo nombre de la compañía el cual seria Producciones BBS (B. por Bob Rafelson, B. por Bert Schneider y S. por Steve Blauner). De este punto en adelante la pequeña pero reconocida productora independiente enfoca su atención a todo tipo de proyectos artísticos como lo fueron: La Ultima Película (The Last Picture Show, EUA, 1971), Drive, He Said (EUA, 1971), Un Lugar Seguro (A Safe Place, EUA, 1971), El Rey de Marvin Gardens (The King of Marvin Gardens, EUA, 1972) y Hearts and Minds (EUA, 1974).   

Y así fue como se iniciaron y triunfaron las Producciones BBS. El especial inicia el próximo Lunes y concluye el próximo fin de semana. Con eso concluyo la introducción a una de las mas importantes productoras de los 60s. La que llego a ser un hogar para ideas innovadoras y un cine ciertamente mas fresco y joven. 

jueves, 20 de enero de 2011

La Sirena


En múltiples ocasiones me he dado cuenta de que una de las principales razones por las que me encanta el cine es la diversidad que existe dentro de el. Jamás me dejo de sorprender por el gran numero de técnicas y movimientos nuevos que crecen y evolucionan día con día. Este mismo sentir es algo que me gustaría compartir con mis lectores y es por eso que el día de hoy les traigo algo un tanto mas diferente. La Sirena (Rusalka, Rusia, 1996) de Aleksandr Petrov, cuarto cortometraje con el en la silla del director. Este trabajo marco el inicio de una carrera que continuaría con trabajos de mayores presupuestos y valores de producción. En esencia,  su ultimo trabajo realmente independiente. 

Es verdaderamente difícil tratar de resumir o explicar el complejo uso narrativo que Petrov tuvo a lo largo del filme. Lo anterior se debe a que la historia no cuenta con un orden lógico que podamos seguir. Petrov tomo un poco de libertades. El hecho de que la historia no cuenta con una narrativa común no quiere decir que solo son un grupo de imágenes sin relación. El buscaba relatar una parte del folclor Ruso al centrarse en la leyenda de las rusalkas (De las cuales el corto toma su nombre), estas son sirenas creadas por las almas de mujeres infelices o suicidas. Esto de cierta forma explica el comportamiento que veremos por parte de la sirena en la segunda mitad del filme. 

El estilo visual del cortometraje es lo que lo convierte en algo realmente único. Este es uno de los pocos filmes en toda la industria que ha utilizado una rara e inusual técnica de animación que hace uso de pinturas de aceite sobre cristal con el fin de crear imágenes en el estilo de pinturas Impresionistas. Ademas de director, Petrov es un animador vanguardista y el mayor exponente de esta forma artística. Cada cuidadoso detalle hace que veamos como una pintura cobra vida frente a nuestros ojos. Desde el estupendo efecto de reflexión del panorama en unos tranquilos lagos hasta las misteriosas expresiones faciales de un viejo monje el corto captura nuestras emociones. Petrov no tuvo que usar palabras para poder decir mucho, al contrario, al concentrar sus esfuerzos en la estética visual de su obra logro que sus imágenes nos hicieran sentir en vez de sus palabras. 

El uso de los colores también soporta el tono sombrío y obscuro que el director busca darle. La paleta esta casi totalmente constituida por tonos fríos acompañados de persistentes grises. El motivo de esto debió haber sido alertarle al espectador que la historia seria trágica y que esos pequeños momentos de esperanza simplemente no llegarían. Fuera cual fuera su motivación, Petrov consigue darle una apariencia única lo cual solo complemento un ya fuerte diseño visual.

Espero que disfruten el cortometraje tanto como yo lo hice. Si bien quizás no sea por la historia (Al menos no totalmente) puedo decir que su estética ganara la atención de prácticamente cualquier persona. Aquí dejo el link al vídeo completo y subtitulado.

La Vida es Bella


Antes de empezar la entrada de hoy me gustaría mencionar un poco mis gustos con el cine. Considero que soy muy abierto a todo tipo de películas. Drama, ciencia-ficción, horror, documentales, animación, prácticamente de todo o al menos eso intento. Si existe un solo genero del cual jamas es sido devoto es la comedia (En especial la comedia romántica). Al igual que todo mundo, disfruto mucho de una comedia bien hecha y relatada pero no puedo dejar pasar el hecho de que una gran parte de ellas son simplemente pésimas (Al menos en lo que a mi respecta). Es claro que existen algunas excepciones como lo es el cine de Chaplin o una que otra con una trama mas interesante. La Vida es Bella (La Vita e Bella, Italia, 1997) de Roberto Benigni cae en esta ultima categoría.

Desde hace años que quería ver esta cinta, siendo la película favorita de mi madre ya me la habían recomendando unos cuantos cientos de veces y hasta hace poco la encontré a la venta con un distribuidor local. Ya tenia me había hecho a la idea de que seria una buena película pero después de verla me di cuenta de que nadie me había comentado realmente de lo que trataba. La mayoría la describía como una cinta sobre el holocausto y como este destruyo la vida de un amoroso padre judío en los tiempos de la Italia fascista. Se podría decir que se trato de todo menos de esto. 

La historia nos sitúa inicialmente en los tiempos de la Italia fascista, un hombre judío se encuentra por casualidad a una joven mujer de la cual queda profundamente enamorado. La primera parte de la cinta narra el como la conquista a través de lo que considera su mayor atractivo, su sentido del humor. A la mitad de la cinta la narrativa da un giro y nos sitúa años después. El y ella ya se han casado y tienen a un inocente y carismático hijo.  Toda su vida se siente perfecta hasta que al ya casi termino de la guerra Italia se ve ocupada por fuerzas alemanas que capturan a el, su esposa y su hijo en un campo de concentración. Aquí vemos algo parecido a una transición de ritmo y enfoque. Intentando hacer de su vida lo mas feliz que fuera posible, el padre hace de toda la situación un juego para su hijo siendo un tanque de guerra el premio a ganar. 

Mas que su inofensiva comedia o su intento de empatizar con el espectador, el aspecto mas destacable del filme es Roberto Benigni. Pocas veces he podido decir que un actor prácticamente nació para hacer un determinado papel, este es una de ellas. Su simpatía y carisma hacen de esta película algo realmente difícil de olvidar. Su sonrisa simplemente contagia felicidad y a nosotros como espectadores nos es tremendamente difícil resistir. La dinámica entre Guido (Roberto Benigni) y Dora (Nicoletta Braschi) es sencillamente perfecta (El que fueran un matrimonio fuera del set probablemente ayudo en eso). Su enamoramiento se siente en todo momento y su forma de compartir pequeños pero significativos detalles me dejo prácticamente sin palabras. 

Otro detalle que note cuando investigue sobre la película fue que mucha gente la interpreto como desagradable y poco sensible con eventos tan delicados y difíciles de tratar como lo es el Holocausto. Es cierto que el tono de la ocupación Nazi se vio severamente relajado con motivo de permitir la comedia y las risas dentro de la película pero en ningún momento sentir que Benigni fuera poco respetuoso con su material. Después de todo la película trata de todo excepto del Holocausto. Este suceso solo fue usado como complemento emocional a la verdadera temática, la superación del espíritu humano. A pesar de estar atrapado en un campo de concentración, Guido jamas muestra a su hijo la verdadera naturaleza de la situación. La dinámica del juego nos hace ver como el uso de la imaginación y la esperanza hacen salir adelante incluso a los mas vulnerables. 

El final es el hogar de los momentos mas significativos y con mayor peso emocional. Creo que no pude evitar sentir un nido en la garganta después de ver como el campo de concentración estaba prácticamente desolado mientras un símbolo del triunfo se hace ver por el horizonte. Como este momento hay muchos mas alrededor de la cinta, que mas que una narrativa lineal es un paseo de emociones que va desde lo hilarante hasta lo sencillamente deprimente. 

Ahora entiendo por que es la película favorita de algunas personas que conozco. Su perfecto balance entre drama y comedia mantiene la cinta fresca y cada escena lleva a otra que causa aun mas ansias por visitar. Siendo el mejor trabajo de Benigni a la fecha y contando con una historia que conmovería hasta la roca mas solida, este filme llega y supera toda expectativa. 

martes, 18 de enero de 2011

Mentiras


El día de hoy realmente empece a sentirme feliz de haber encontrado aquel sitio con el cual pude hacer la entrada de ayer. Un cortometraje como ese simplemente no es suficiente para el gran apetito de un cinefilo por lo que a lo largo del día de hoy estuve revisando uno tras otro. La gran mayoría son verdaderamente increíbles; muestras de talento y creatividad como ya hace tiempo no me tocaba ver. Sin embargo, como en todo buen arte, algunos de ellos destacaron mas que otros por su excelsa ejecución y originalidad. Mentiras (Lies, Suecia, 2009) de Jonas Odell es uno de ellos. 

De inicio, cabe aclarar que este cortometraje no utiliza una narrativa convencional. El trabajo se divide en tres segmentos distintos con sus propias historias contenidas ademas de un estilo visual único a cada uno de ellos. Esto los convierte en una clase de compilación que si bien es cierto no se ven relacionados directamente, sus temáticas e implicaciones los hacen complementos perfectos. Se podría decir que Odell dio justo en el blanco y no soy el único que piensa lo mismo; con excelente recepción en múltiples festivales incluyendo Sundance en el cual incluso fue ganador. 

La temática principal del cortometraje trata acerca de como las mentiras nos pueden llevar a desenlaces que uno no puede esperar ni predecir, solo afrontar. El primer segmento demostrando las mentiras de aquellos externos a nosotros, el segundo mostrando lo que ocurre cuando se le miente a un ser querido y el ultimo, siendo el mejor y mas profundo de los tres, muestra lo que ocurre cuando nos mentimos a nosotros mismos con el fin de convencernos.

El primero del singular trío nos relata a modo de primera persona el plan de unos ladrones para estafar unos corporativos. Nuestro narrador hace uso de su fría y sistemática voz para darnos a entender la naturaleza de su operación. Ningún error es aceptable y justamente por ello es que falla la operación. Su estilo visual retoma elementos visuales clásicos de las cintas de robo actual. El corte y la animación tal cual explicación de experto justo antes de cometer el gran asalto, una mente maestra trabajando. Las mentiras que hacemos a los otros tarde o temprano nos revelan y las consecuencias pueden causar exactamente lo opuesto a lo que queríamos lograr. 

El segundo segmento nos habla de niño que roba a su propia madre. Muchas veces cuando pensamos en lo graves que pueden ser las mentiras no tomamos en cuenta a quien se las hacemos. Dicen que no existe un peor acto que engañar a nuestros propios padres pero que pasaría si eso fuera por el bien común. Odell busca identificarnos con su personaje incluyendo un final feliz a su historia pero sin dejar de lado ese sentimiento de culpa y temor que todos sentimos cuando mentimos. La sensación de ser descubierto entorpece nuestras acciones y pone nuestros nervios a su máximo nivel. La música y la rítmica visual hacen de este el segmento mas disfrutable de todos.

El tercer y ultimo segmento es donde Odell y su habilidad de relatar historias se hacen relucir. Este nos narra la historia de una mujer que siempre se mintió a si misma, desde sus primeros pasos hasta el momento donde no pudo mas con la carga. Los tonos profundos de Odell le agregan un nuevo nivel de dramatismo a la historia aumentando así su peso emocional. Si buscaba sentimientos de empatia es claro que lo logro con excelentes resultados. Uno no puede evitar sentirse triste por la protagonista. Desde su alejada voz hasta su apariencia hecha de sombras se ven reflejadas las deprimentes facetas de su vida y el como realmente nunca estuvo viva. Mejor dicho, jamas empezó a vivir una vida real, siempre vivió una mentira. 

Incluso después de haber comentado cada segmento por separado se me hace casi imposible explicarlos de forma concisa. La clara relación entre estos es su percepción de las mentiras pero bajo esa visible unión se esconde una continuidad mucho mas significativa. Estas historias no están ordenadas al azar ni tampoco por su estilo visual o animación. Están organizadas de esa forma porque representan el aumento de las consecuencias al mentir. Lo mas fácil para nosotros es mentir a los demás puesto a que no nos relacionamos directamente con ellos. Cuando se le miente a un ser cercano, esa pequeña mentira inicial pasa a ser una muestra de ingratitud y poco respeto al ser querido. Lo peor viene cuando nos mentimos a nosotros mismos pues de esa forma dejamos de distinguir lo que realmente es verdad y lo que no ademas de afectar de manera directa lo que consideramos nuestro propio ser. 

Odell crea en Mentiras un trabajo que merece cada aplauso y elogio que ha recibido. Desde su impecable presentación hasta su complicada estructura, Mentiras vale cada segundo de nuestro tiempo y en el cual apreciaremos la verdad y nada mas que la verdad. Aquí les dejo de nuevo el link al sitio del corto.

lunes, 17 de enero de 2011

El Bote


Alguien con talento no necesita ridículas cantidades de dinero para lograr hacer algo efectivo. Eso es algo que se ve día con día en el terreno de la cinematografía. Los mejores resultados que podremos ver son aquellos que utilizan los recursos ingeniosamente ademas de tener un director que se preocupe mas por contar una buena historia que por adornarla. Esto es evidente en el cortometraje El Bote (Bottle, EUA, 2010) de Kristen Lepore.  

Lepore hace lo que todo buen cineasta debería de hacer; preocuparse por relatar algo interesante y personal en vez de buscar compensar una mala historia con recursos costos. En pocas palabras, ella hace uso de la sensibilidad en vez de un espectáculo vació. El trabajo aquí expuesto hace claro que ella posee esa magnifica habilidad. La historia se centra en la amistad y como incluso con grandes distancias esta puede tornarse en algo solido y especial. Dejare la explicación hasta ese punto debido a que no quiero arruinar la experiencia a nadie ademas de por su corta duración (Un cortometraje debe de ser corto pero en este caso la duración no excede los 5 minutos en comparación a otros que se extienden incluso por mas de media hora).

Cuando uno piensa en protagonistas o personajes de una historia no se imagina del todo que esta por venir, al menos en este caso. Cuando vi el titulo me esperaba una historia totalmente diferente a lo que recibí y debo de admitir que ese simple hecho hizo que me emocionara por ver mas (Incluso los cortos de 5 minutos pueden emocionar y conmover cuando son bien ejecutados). La originalidad aquí es muy clara y realmente se siente bien ver algo refrescante. Dentro de un arte donde todo se siente un poco a un "lo he visto en otra forma" este elemento triunfa sobre todo lo demás. Es la regla básica de darle al publico lo que aun no tiene y quitarle lo que le sobra.

Nuestros dos protagonistas son todo excepto humanos... o eso es lo que uno podría llegar pensar. La realidad es que pocas veces he visto acciones tan humanas en un tiempo tan corto y sin una sola palabra. Cada escena se ve llena de inocencia acompañada de un buen toque de descubrimiento. El intercambiar recuerdos, el compartir lo nuestro sueños y, de aun mas importancia, el ser esa compañía que al otro le hace falta. Esto no solo se ve representado directamente mediante la historia sino que también en base de los complementos. A primera vista estos son totalmente opuestos pero de igual manera se ven complementados a la perfección. 

Otro aspecto que fue particularmente agradable de ver en la cinta fue como Lepore hace uso de una técnica como el stop-motion. Generalmente asociada a los filmes de animación y maquetismo; aquí se ve utilizada junto a técnicas de live-action (Películas con locaciones y personajes físicos) tradicional. Esto hace que el cortometraje se vea único ademas de que le brinda una sensación mucho mas relajada y hasta cierto punto sencilla. 

Ojala todos los directores fueran parecidos a Kristen Lepore pero no en estilo (Eso debería ser único a ella de todos modos) sino en esa habilidad de saber a que se le debe de dar prioridad en el proyecto y como la historia siempre triunfara sobre todo lo demás. Después de todo, el cine esta hecho a bases de historias que contar. Por ultimo les dejo el link al cortometraje en vista de que este lo obtuve en una pagina dedicada a cortometrajes (Recomiendo que guarden y visiten esa pagina con regularidad, en ella se presentan trabajos muy buenos en una gran presentación).  

domingo, 16 de enero de 2011

Cine a la Orden


Como ya había comentado de forma inicial en la primera entrada de este blog, me interesa mucho saber que le gusta ver a todos mis lectores. Desde la concepción del proyecto, la idea ha sido que los lectores puedan tener una gran participación en la construcción de esta comunidad. No me refiero únicamente a comentar o a leer entrada tras entrada sino a que cada quien posea una voz propia y la de a conocer. Partiendo de ese simple ideal fue que tuve la idea de hacer lo que se convertirá en la primera sección establecida de este blog. "Cine a la Orden" tratara de hacer algo en especifico, sera el lugar donde ustedes, los lectores, podrán sugerir una película con el fin de que sea reseñada, proponer nuevas secciones y especiales dentro del blog e incluso planear pequeños eventos donde algunos cuantos de nosotros nos juntemos personalmente para discutir este magnifico arte y medio de entretenimiento. Todo esto con el fin de expandir y unir a la comunidad ya existente. Esperen ver entradas de "Cine a la Orden" de forma regular y sujeto a la cantidad de recomendaciones y sugerencias que hagan (En la sección de Comentarios).

sábado, 15 de enero de 2011

Días del Cielo


Cuando se habla de filmes como Días del Cielo (Days of Heaven, EUA, 1978) de Terrence Malick es difícil hacerlo sin tratar de remarcar primero de que se trato la película. El cine, como todo arte existente, necesita ser libre en interpretación. Nadie puede decir cual interpretación es la correcta o negar que la opinión del que se encuentra a mi lado no tiene el mismo valor. Si no fuera por esto el cine se volvería predecible y ya no tendría sentido discutir o analizar una cinta mas de una vez. Es por eso que me gustaría evitar el sugerir una forma en particular de ver el filme pero siento que de esa forma el argumento de este seria mas fácil de comprender y disfrutar. 

El filme nos cuenta una simple pero profunda historia. Un obrero asesina a su jefe accidentalmente después de una discusión. Por miedo a ser atrapado, este huye de Chicago junto a su novia y su hermana menor con el fin de participar en la cosecha anual en el sur del país. Queriendo evitar problemas por su relación, el y ella dicen a todos que en realidad son hermanos. Viendo que el camino esta libre, el dueño de la granja se enamora poco a poco de su novia. Después de escuchar que el granjero probablemente fallecería pronto, le propone a su novia que se case con el para después quedarse con la herencia. Esto lleva al triangulo amoroso a una relación inestable y conflictiva con resultados inesperados. 

A primera vista, la historia parece tratar de los problemas que sufren los tres protagonistas debido a sus enredos amorosos pero no creo que esto fuera lo que Malick tenia en mente. Toda la cinta cuenta con una narradora que  nos provee con lo que probablemente sea el enfoque correcto. Linda (Linda Manz), la hermana menor del joven obrero Bill (Richard Gere), cuenta lo que ella percibe de este dilema amoroso. Su narración dota al filme de su verdadero propósito. Después de ver la cinta uno puede llegar a la conclusión de que la intención de Malick era en realidad contar la historia de Linda y como ella veía su vida cambiar y adaptarse a las circunstancias del momento. En mi caso, el conocer esta interpretación me ayudo a disfrutar mucho mas el filme y realmente hacerlo brillar. 

La interacción entre estos personajes brinda un aspecto humano y sincero a la narrativa. Esos cortos pero significativos momentos donde Bill y su novia Abby (Brooke Adams) comparten su comida, algunas risas e incluso gestos de cariño  nos dejan ver como su relación es una donde el amor es lo importante. A pesar de que Bill pone en peligro su relación al sugerirle casarse con el Granjero (Sam Shepard), esa sensación de enamoramiento jamas se pierde entre ellos. El únicamente buscaba vivir una mejor vida junto a su novia y su hermana, a pesar de haber tomado el camino equivocado. Linda ve esto sin mucha preocupación o comprensión de la situación. Ella simplemente vive su vida y experimenta los mejores momentos de esta cuando el Granjero y Abby llegan a tener algo mas. De forma literal, esos fueron días del cielo. 

Al hablar de esta cinta, el punto mas importante recae en algo mucho mas grande y simbólico (Ninguna persona que la haya visto puede contradecir esto), su cinematografía. Cuando se habla sobre Días del Cielo es imposible no mencionarla. Malick, con la ayuda de un magnifico Nestor Almendros (Quien gano el Oscar debido a esta película), muestra un mundo de gran magnitud. El detalle y la grandeza de las tomas se ven reflejados en todo momento. El innovador uso de la luz natural y su incomparable habilidad para generar tomas realistas provee a Malick de un complemento narrativo. En muchos momentos el dialogo era innecesario; las imágenes capturaban mucho mejor esos momento que cualquier palabra que el guion pudiera presentar. Es interesante observar como Malick opta por capturar momentos triviales y poco enfocados, con el fin de mostrarnos que su historia significa mucho mas que aquello meramente relacionado con sus personajes. El mundo en el que habitan es igual de importante que cualquiera de ellos. Disfruté especialmente de aquellas tomas que mostraban la casa del Granjero en el fondo. La forma en la que los colores del ocaso chocaban con las descoloridas cosechas y el como esa casa se levantaba tal cual gigante entre esos desolados prados es simplemente emotivo. El resultado de todo este esfuerzo pago frutos, Días del Cielo es uno de los filmes mas hermosamente filmados de todos los tiempos. 

Aun no conforme con crear una emotiva y simbólica cinta, Malick nos da un mensaje vagamente oculto. La historia nos ubica dentro de unos Estados Unidos recién enfrentados posterior a la Primera Guerra Mundial. La maquinaria y la revolución industrial empezaban a influir sobre una agricultura que únicamente había experimentado el uso de personas reales trabajándola. Los campesinos iniciaban el uso de estos instrumentos que les facilitarían el trabajo pero también lo ocuparían cuando mas lo necesitaran. Una pelea y alianza imperceptible entre hombre y maquina, tradición e innovación. 

Después de ver esta película comprendí porque Terrence Malick ha producido tan pocos largometrajes a lo largo de una carrera con ya mas de 40 años. De no ser así, no tendríamos obras de arte tan cuidadas y emotivas como esta.  

viernes, 14 de enero de 2011

Atracción Peligrosa


Hoy tuve la oportunidad de asistir a el primer día de exhibición del segundo largometraje de un recién llegado Ben Affleck. Con apenas dos filmes realizados en la silla del director desde que decidió dar este giro a su carrera es increíble lo bien que lo ha hecho. Empezando con Desapareció una Noche, este nos muestra su atención al detalle y la construcción de aquellos que habitan sus historia. Atracción Peligrosa (The Town, EUA, 2010) es un muy satisfactorio ejercicio en el genero de la criminologia. Affleck consigue mantenernos preocupados por sus personajes ademas de agregar mas de una escena de acción perfectamente orquestada.

Sin mucha justificación he aquí la premisa: Un joven ladrón y su unidad cometen un robo en un importante banco de Charlestown que, como nos propone la historia, es la capital del robo. Un descuido atrapa a los asaltantes con la activación de una alarma por lo que estos deciden tomar una rehén. Al ver que no sirve de nada tenerla atrapada, la dejan ir pero no sin antes haberle causado un evento traumatico. Mientras ella se comunica con el FBI, el equipo decide enviar a su líder a vigilarla y mantenerla callada. Esto lo llevara una relación en la que tendrá que decidir que es lo mas importante y que tanto esta dispuesto a sacrificar para continuar.

Como se puede interpretar e incluso predecir a base de la premisa, esta historia no es acerca de ladrones de bancos ni tampoco de quien puede soportar mas disparos sin derramar una sola gota de sudor; es acerca de como un joven Doug MacRay (Ben Affleck) descubre una relación que jamas le ha sido permitida vivir debido a su estilo de vida. Esa sensación de descubrimiento y de sorpresa que se puede escuchar en cada linea de dialogo entre Doug y su compañera Claire Keesey (Rebecca Hall) hacia una solida y creíble relación.  Aquellas escenas donde los personaje son desarrollados mas atentamente como una discusión que ambos tienen acerca de sus pasados en un parque son las que nos alientan a preocuparnos. Si a cualquiera de estos dos personajes les ocurriera algo seria realmente estresante o esperanzador ver cual seria su destino. Increíblemente el personaje mas destacable en esta historia no son ninguno de esos dos involucrados sino el mejor amigo de Doug, James Coughlin interpretado por un, como de costumbre, excelente Jeremy Renner. Un personaje que parece haberse deslindado ya hace mucho de lo que es eticamente correcto. Comportarse de forma impredecible y prepotente para solo unos momentos después volverse de nuevo ese amigo de toda su vida.

Las escenas de acción son el otro punto fuerte de la cinta. Desde la secuencia inicial hasta aquella que cierra la narrativa, Affleck decide mostrar su aspecto mas meticuloso, aquel que involucra un pulido nivel técnico. La secuencia mas notable de toda la cinta es quizás aquella que toma lugar segundos después de que el equipo falle un asalto planeado. El tono lento y calculador del filme es rápidamente transformado en algo mucho mas ágil y emocionante. Unos asaltantes huyendo y cambiando constantemente de vehículos a través de los estrechos callejones de Charlestown a media luz del día se escucha como la receta perfecta para una buena escena de acción y créanme, lo es. No entrare mas en detalle acerca de esto debido a que no quiero arruinar esa sensación a nadie que no haya tenido la oportunidad de verla.

Lamentablemente, no todo en la película es perfecto. La narrativa sufre muchísimo por la excesiva duración de la cinta. Las moderadas 2 horas de duración se sienten muy lentas y en partes incluso aburridas. Hubo múltiples escenas que pudieron haber sido fácilmente eliminadas a favor de un ritmo mas progresivo. A momentos me sentí estancado y aburrido, la cinta se movía lentamente entre escena y escena y las discusiones no se sentían significativas en lo absoluto. No es que espere una película de acción, de hecho se agradece cuando los personajes son desarrollados en vez de apresurados, pero en varias ocasiones estuve, literalmente, a punto de caer en sueño.

Ademas de esos problemas que Affleck tuvo en su edición, la historia sufre de varios inconvenientes y acciones poco lógicas dentro del contexto de la cinta. Algunos errores eran mínimos por lo que los dejaba pasar pero otros simplemente eran inexcusables. No es fácil hacer una buena historia criminologica pero esa tampoco es una excusa. Muchas veces me encontraba preguntándome a mi mismo el porque de la incompetencia de algunos agentes del FBI. Teniendo a los presuntos culpables en la mira lo menos que podían hacer era vigilarlos pero esto tiende a ocurrir menos de lo que uno pensaría. Eso solo fue un ejemplo, cuando puedan ver la cinta probablemente notaran la mayoría.

Al final del día, Atracción Peligrosa nos da una admirable ejecución y un desarrollo de personajes muy bien establecido y manejado. No es perfecta pero tampoco es mala o poco lograda. Definitivamente fue una buena elección para ver en este fin de semana.

jueves, 13 de enero de 2011

Macario


Es una lastima que ya no se encuentren fácilmente películas que ejemplifiquen lo que es el cine mexicano (De forma positiva) como Macario (México, 1960), de Roberto Gavaldon. Recuerdo que la primera vez que escuche sobre la cinta en cuestión fue hace unos 2 años durante una platica con mi abuelo. Al ser una de las personas que mas conoce y disfruta de nuestro cine, el simple hecho de recomendarla la convertía en una película que tenia que ver. Eso fue justamente lo que ocurrió, me llevo un tiempo conseguirla debido a que cintas como esta no son fáciles de encontrar pero después de unos cuantos meses pude comprar mi copia. Salí del auto, subí a mi cuarto e inmediatamente comencé a verla. 

Como ya parece ser la rutina, comienzo con la premisa. La historia nos habla de un humilde y trabajador padre que siempre da lo poco que tiene a sus hijos y esposa. Al vivir en extrema pobreza, lo único que desea el padre es poder comer todo un guajolote el solo. Su deseo se cumple y este corre a esconderse entre unas rocas dispuesto a comer.  Es en este momento donde la Muerte hace su aparición y le pide un pedazo. Por razones únicas a el, le comparte y esta le recompensa dándole una botella con agua curativa con lo que se convierte en el doctor del pueblo. 

Una historia centrada en algo tan humano y trivial como lo es el hecho de tener hambre necesita de un protagonista que no solo sea honesto sino realista en sus emociones y es ahí donde Ignacio Lopez Tarso entra en la escena. Sin Lopez Tarso en el papel protagonico esta cinta no seria lo mismo, punto. Su actuación es el punto mas alto de toda la historia y razón suficiente para invertir tiempo en verla. A lo largo de la cinta su evidente frustración juega un papel muy importante, le agrega otro nivel de caracterización a la historia y vuelve mas interesantes a el y a los que lo rodean. Esa dinámica que Gavaldon maneja de forma tan rítmica y progresiva convierte las decisiones y les da mas peso emocional. 

La cinematografía es sumamente agradable y mas que decorar la narrativa, la hace limpia y simple de entender. Gavaldon quería contar una historia y busco ir al punto sin tomar muchos atajos ni detenerse tanto como para desinteresarnos. Las locaciones son detalladas y realmente nos dan una buena imagen de la pobreza que acompaña la vida de Macario. Su casa es pequeña y hecha de materiales básicos, el pueblo es rural pero muy ajetreado y los edificios de los gobernantes no respiran la pobreza que los rodea. 

Ya habiendo tocado los aspectos mas técnicos de la producción paso a lo que distingue a este filme. Antes de que la Muerte almuerce con Macario, dos peculiares personajes mas lo visitan. El primero de ellos es el Diablo. Este le ofrece múltiples posesiones con tal de que comparta su guajolote pero Macario rechaza todas debido a que no les encuentra uso. El segundo personaje es Dios. Este le pide humildemente un pedazo del ave pero Macario argumenta que el lo puede tener todo por lo que lo rechaza también. Después de ver que no comparte su comida con ninguna de estas figuras es interesante ver por que si con la Muerte. Su motivación fue simple, si le compartía un pedazo, ella lo dejaría comer mas antes de llevárselo. Macario no es la persona mas lista pero las circunstancias y la necesidad hace que cada cosa tome un nuevo significado y un nuevo valor. Esa perseverancia y motivación dejan a la película en un contexto nuevo para el espectador. 

Quizás sea una lastima que nuestro país ya no produzca cine como el de antes, o por lo menos no tan frecuentemente, pero con filmes como Macario en nuestra historia, esto se vuelve algo mas fácil de aguantar. 

miércoles, 12 de enero de 2011

10 Minutos


Cientos de cosas pueden ocurrir durante un periodo tan largo y pequeño como lo son 10 simples minutos. Si nos ponemos a pensar que en una décima parte de eso, nacen en promedio 250 infantes alrededor del planeta, esa inicialmente e insignificante cantidad de tiempo se torna algo realmente esencial. Esto es exactamente lo que se nos presenta en lo que fue considerado el mejor cortometraje Europeo hace ya un largo tiempo (Esto, cabe aclarar, es increíblemente subjetivo y realmente hace poca justicia a la extensa variedad de cortos de origen Europeo), hablo de 10 Minutos (10 Minutes, Bosnia-Herzegovina, 2002) del director Ahmed Imamovic. 

El cortometraje cuenta con una historia simple, relata dos historias que toman lugar en dos diferentes partes del mundo pero que ocurren en el mismo lapso de tiempo, 10 minutos según el corto para ser exactos. Mientras un feliz y desorientado turista busca sacar el revelado de unas fotos familiares; un joven desobediente busca algo de beber para su familia al momento en que se ve atrapado en un ataque guerrillero. La premisa se siente un tanto original si es que no del todo pero eso no es realmente lo importante en todo esto. El cuidado a las tomas y el uso de la música es lo que realmente ponen a esta historia en un nuevo nivel 

Mientras uno trata de buscar cortos, aquellos sobre la guerra sobran en abundancia y muchas veces algunos con mucho mejores (o mucho peores) resultados que otros. Lo interesante aquí es la forma en la que Imamovic se acerca a sus personajes. Mientras en otros la abundancia de militares y héroes de guerra se hace notar aquí el director busca un acercamiento mas humanista, es por ello que nos pone frente a civiles que con miedo habitan zonas de alto riesgo. Esta historia no trata de la guerra sino acerca de los peligros y consecuencias de vivir en una. No tenemos soldados mal heridos ni tampoco amores poco realistas en el campo de batalla; solo tenemos a un joven que no sabe como reaccionar cuando llega el momento.

Pero esa es solo una parte de la historia, la otra nos da a conocer el otro lado de la moneda. Mientras en algún lugar en medio del planeta gente inocente se ve asesinada, del otro lado (O quizás no tan lejos) los turistas gozan de diversiones y lujos, un enfoque que intenta darnos a entender lo poco empaticos y lo muy egocéntricos que somos como personas. Las circunstancias son las que nos separan pero muchas veces actuamos como si los problemas realmente no existieran. No digo que el turista sea el malo de la historia, es solo una muestra de como dos mundos muy diferentes existen dentro de uno solo y como aquellos seres que también son de carne y hueso se ven sufriendo en vez de coexistiendo. 

Retomando un poco mi argumento inicial, la cinematografía y la composición dentro de este cortometraje son magnificas. Algo que me gustaría hacer notar es el increíble hecho de que toda la sección bélica del filme es elaborada con una única toma continua. Toda película se caracteriza por su edición de distintas tomas meticulosamente rodadas pero en este caso las cosas son un tanto diferentes. Imamovic opta por hacer uso de una larga toma continua la cual ademas de ser bien hecha da un dinamismo excepcional a esa parte del cortometraje. Nuestra atención no se pierde y el recorrido que hace el joven para tomar el agua se ve ininterrumpida. Mi segmento favorito es definitivamente las tomas descendentes  en las escaleras. La música por el otro lado, es inmersiva pero jamas distractora. Simplemente fluye con la cinta de forma harmoniosa.

Por ultimo pero gustaría pedir una gran disculpa a todos aquellos lectores que no pudieron encontrar la entrada del día de ayer. Como mencione en la primera entrada de este blog, una persona muy especial estudiara lejos de aquí por 4 meses. El día de ayer fue la ultima oportunidad que tuve de poder verla y estar con ella por lo que llegue a mi casa ya muy tarde como para poder escribir. Me disculpo por haber roto mi promesa a menos de una semana de haberla aceptado inicialmente, de ahora en adelante se tendrá una entrada todo los días como ya fue prometido. Si esa persona especial esta leyendo esta entrada en particular me gustaría decirle que la extrañare mucho y que estoy muy feliz de haberla podido despedir en el aeropuerto. Aquí les dejo el link al cortometraje del que tanto les he hablado. 

lunes, 10 de enero de 2011

Golpes del Destino


Cada vez quedo mas sorprendido por la cantidad de excelentes películas que ponen en la televisión a horas de la madrugada. Ayer probablemente era un día en el que me debía de dormir temprano, la escuela iniciaba a las 7 y aun necesitaba acomodar las cosas que ocuparía. Al menos eso fue lo que pensaba, hasta que poco antes de quedarme dormido encontré Golpes del Destino (Million Dollar Baby, EUA, 2004) en TNT. Desde hace un buen tiempo había querido visitar este filme, siempre me ha gustado el trabajo de Eastwood y al solo haber escuchado buenos comentarios mi inquietud por verla era totalmente justificada. 

Antes de decir cualquier otra cosa me gustaría explicar un poco la premisa de la cinta. Si lo vemos por fuera, la historia parece caer perfectamente en la categoría de cualquier otra película sobre boxeo. Pero eso no puede estar mas alejado de la realidad. La historia nos habla de una joven que siempre ha sido vista como menos y un viejo entrenador que jamas ha querido entrenar a una mujer. Ella quiere llegar a ser campeona en el boxeo y de manera casi milagrosa logra convencerlo de entrenarla. Todo esto narrado por un espectacular Morgan Freeman como el mejor amigo del entrenador. 

Cuando me pongo a pensar en que es lo que separa este trabajo de esos incontables otros fallidos me viene una larga lista de razones a la mente. Algunos podrán decir que fueron las fuertes interpretaciones de su reparto, otros que fue el ritmo meticuloso y bien calculado de la cinta y algunos inclusive que fue la inteligente dirección. Si bien comparto todas las anteriores razones, existe una que a mi opinión es la mas fuerte y única de todas, el grandisimo cuidado al desarrollo de sus personajes. 

Desde los momentos iniciales de la película podemos apreciar eso. Como toda una realidad ha sido creada por la historia y se ha visto poblada por personajes con motivaciones y deseos bien establecidos. Desde pequeños diálogos como el que toma lugar en la oficina del gimnasio, en donde el entrenador Dunn (Clint Eastwood) y su mejor amigo Scrap (Morgan Freeman) hablan de que este ultimo compre un par de medias nuevas hasta detalles como aquel postre de limón que Dunn y la joven boxeadora Maggie  (Hilary Swank) comparten en un pequeño restaurante a la orilla de la carretera. Esos momentos en los que la trama principal se deja a un lado para que realmente podamos conocer a los personajes es lo que hace especial a esta película.  

Pero la grandeza de este filme no solo recae sobre sus personajes bien establecidos también lo hace en su gran temática interior. Cuando termine de verla lo primero que pensé fue que a pesar de centrarse en el boxeo y la superación de la joven campeona, la historia era mucho mas que eso. Era un viaje en el cual la redención y valoración de uno mismo es mas importante que todo lo demás. Maggie no pelea para ganar el campeonato sino para construir un lugar en el que fuera aceptada y estimada. Dunn no busca ganar una pelea mas, el busca redención por sus actos pasados y sin saberlo consigue la felicidad incluso si esta no permaneció por un tiempo alargado. Scrap no busca administrar un ya decadente gimnasio sino recuperar a un amigo que perdió tras un lamentable accidente. 

Es complicado comparar esta película con otros trabajos de Eastwood, después de todo, un largo camino fue el que tuvo que recorrer para llegar hasta este punto. Incluso tiempo después de finalizar, Eastwood ya tenia algunos nuevos proyectos por realizar. Difícil o no, existe una cosa que es segura, Golpes del Destino fue, es y sera uno de los mejores trabajos del director a lo largo de toda su carrera. 

domingo, 9 de enero de 2011

La Casa de los Pequeños Cubos


De inicio me gustaría aclarar que el titulo de este cortometraje no esta traducido al idioma español por lo que tome su titulo mas cercano (Estadounidense) y lo traduje exactamente. Es por ello que probablemente no logren encontrar muchos resultados si buscan información haciendo uso del titulo en este idioma. También me gustaría comentar que, al igual que el cine, este blog presentara entradas de todo tipo de trabajos, desde el largometraje hasta el documental. No los aburro mas y continuó con lo realmente importante, el cortometraje en cuestión.

Siempre he sido admirador del trabajo en cortometraje. Al ser uno de los medios mas accesibles en lo que respecta a la cinematografía, el contenido que se encuentra en ellos es increíblemente diverso y en una gran cantidad de casos, igualmente original. Los autores de estos trabajos raramente cuentan con el presupuesto o las relaciones necesarias para realizar un largometraje como tal. Eso nos lleva a un uso mas ingenioso de nuevas técnicas y estilos en comparación al riesgo que se tendría que afrontar con un presupuesto mucho mayor.  

El siguiente trabajo fue dirigido por el animador Japones Kunio Kato cuyo nombre probablemente no sea tan conocido como el de otros artistas de origen Nipon debido a su parcial falta de trabajos realmente reconocidos en el continente Americano. En 2008, presenta su mejor trabajo y seguramente su mas importante, La Casa de los Pequeños Cubos (Tsumiki no ie, Japón, 2008) mejor conocida como La Maison en Petits Cubes para su uso en los distintos circuitos de festivales. Cabe mencionar que este cortometraje en particular se hizo acreedor del premio a Mejor Cortometraje Animado en los Oscares de 2008. 

La contenida historia es bastante simple, un anciano que vive solo en su hogar en medio del océano se ve en la necesidad de agregar un nuevo piso a su casa debido a un incremento en el nivel del agua. Terminada su reparación, pierde uno de sus objetos mas preciados y decide buscarlo. Conforme va buscando, se da cuenta de lo mucho que ha vivido he inicia a reconstruir su pasado con fin de recordar lo ya olvidado. 

Con trabajos como este realmente no se por donde comenzar. Su duración se extiende a unos perfectamente adecuados 12 minutos, al ver el corto me di cuenta que el corte fue casi perfecto. Realmente no hay escenas que pudieron haber sido eliminadas ni otras que agregadas. La narrativa avanza con cada imagen y el lento movimiento de las escenas acentúan el melancólico sentimiento de la misma. La música lleva de la mano al espectador y le hace recordar a el mismo como se sentiría estar en el lugar de aquel anciano. Realmente es difícil de describir esa sensación que uno siente al presenciar todas las imágenes que aquí se presentan. 

Sin embargo, el cortometraje no busca deprimir a quien lo esta viendo. Si bien las imágenes son frías y la atmósfera un tanto pesimista, todo eso nos ayuda a recordar lo mucho que dejamos pasar los momentos de alegría que se nos presentan y los cuales tristemente olvidamos en favor de lo negativo. Como aquellas grandes torres debajo del mar simbolizan una larga vida los cuartos dentro de ellas son vestigios de recuerdos  ya olvidados. Pero al igual que cuando abrimos un viejo álbum de fotos, el que esos recuerdos hayan sido enterrados tiempo atrás no significa que no los podamos revivir y disfrutar nuevamente. 

No quiero arruinar una magnifica experiencia por lo que me detendré en eso. Siendo una experiencia tan corta y tan gratificante me es imposible recomendarles mas este trabajo. Espero que al igual que a mi los recuerdos del mismo los acompañen un largo tiempo por venir. Les dejo aquí el cortometraje completo: