El día de hoy realmente empece a sentirme feliz de haber encontrado aquel sitio con el cual pude hacer la entrada de ayer. Un cortometraje como ese simplemente no es suficiente para el gran apetito de un cinefilo por lo que a lo largo del día de hoy estuve revisando uno tras otro. La gran mayoría son verdaderamente increíbles; muestras de talento y creatividad como ya hace tiempo no me tocaba ver. Sin embargo, como en todo buen arte, algunos de ellos destacaron mas que otros por su excelsa ejecución y originalidad. Mentiras (Lies, Suecia, 2009) de Jonas Odell es uno de ellos.
De inicio, cabe aclarar que este cortometraje no utiliza una narrativa convencional. El trabajo se divide en tres segmentos distintos con sus propias historias contenidas ademas de un estilo visual único a cada uno de ellos. Esto los convierte en una clase de compilación que si bien es cierto no se ven relacionados directamente, sus temáticas e implicaciones los hacen complementos perfectos. Se podría decir que Odell dio justo en el blanco y no soy el único que piensa lo mismo; con excelente recepción en múltiples festivales incluyendo Sundance en el cual incluso fue ganador.
La temática principal del cortometraje trata acerca de como las mentiras nos pueden llevar a desenlaces que uno no puede esperar ni predecir, solo afrontar. El primer segmento demostrando las mentiras de aquellos externos a nosotros, el segundo mostrando lo que ocurre cuando se le miente a un ser querido y el ultimo, siendo el mejor y mas profundo de los tres, muestra lo que ocurre cuando nos mentimos a nosotros mismos con el fin de convencernos.
El primero del singular trío nos relata a modo de primera persona el plan de unos ladrones para estafar unos corporativos. Nuestro narrador hace uso de su fría y sistemática voz para darnos a entender la naturaleza de su operación. Ningún error es aceptable y justamente por ello es que falla la operación. Su estilo visual retoma elementos visuales clásicos de las cintas de robo actual. El corte y la animación tal cual explicación de experto justo antes de cometer el gran asalto, una mente maestra trabajando. Las mentiras que hacemos a los otros tarde o temprano nos revelan y las consecuencias pueden causar exactamente lo opuesto a lo que queríamos lograr.
El segundo segmento nos habla de niño que roba a su propia madre. Muchas veces cuando pensamos en lo graves que pueden ser las mentiras no tomamos en cuenta a quien se las hacemos. Dicen que no existe un peor acto que engañar a nuestros propios padres pero que pasaría si eso fuera por el bien común. Odell busca identificarnos con su personaje incluyendo un final feliz a su historia pero sin dejar de lado ese sentimiento de culpa y temor que todos sentimos cuando mentimos. La sensación de ser descubierto entorpece nuestras acciones y pone nuestros nervios a su máximo nivel. La música y la rítmica visual hacen de este el segmento mas disfrutable de todos.
El tercer y ultimo segmento es donde Odell y su habilidad de relatar historias se hacen relucir. Este nos narra la historia de una mujer que siempre se mintió a si misma, desde sus primeros pasos hasta el momento donde no pudo mas con la carga. Los tonos profundos de Odell le agregan un nuevo nivel de dramatismo a la historia aumentando así su peso emocional. Si buscaba sentimientos de empatia es claro que lo logro con excelentes resultados. Uno no puede evitar sentirse triste por la protagonista. Desde su alejada voz hasta su apariencia hecha de sombras se ven reflejadas las deprimentes facetas de su vida y el como realmente nunca estuvo viva. Mejor dicho, jamas empezó a vivir una vida real, siempre vivió una mentira.
Incluso después de haber comentado cada segmento por separado se me hace casi imposible explicarlos de forma concisa. La clara relación entre estos es su percepción de las mentiras pero bajo esa visible unión se esconde una continuidad mucho mas significativa. Estas historias no están ordenadas al azar ni tampoco por su estilo visual o animación. Están organizadas de esa forma porque representan el aumento de las consecuencias al mentir. Lo mas fácil para nosotros es mentir a los demás puesto a que no nos relacionamos directamente con ellos. Cuando se le miente a un ser cercano, esa pequeña mentira inicial pasa a ser una muestra de ingratitud y poco respeto al ser querido. Lo peor viene cuando nos mentimos a nosotros mismos pues de esa forma dejamos de distinguir lo que realmente es verdad y lo que no ademas de afectar de manera directa lo que consideramos nuestro propio ser.
Odell crea en Mentiras un trabajo que merece cada aplauso y elogio que ha recibido. Desde su impecable presentación hasta su complicada estructura, Mentiras vale cada segundo de nuestro tiempo y en el cual apreciaremos la verdad y nada mas que la verdad. Aquí les dejo de nuevo el link al sitio del corto.
Mentiras: Lies - Short of the Week
Suena bien pero podrías pasarnos el link para verlo? no me mal entiendas la reseña esta muy bien pero me gustaría verla (:
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